martes, 30 de agosto de 2011

Tres salvavidas



Había pensado en hacer una entrada sobre mis prendas imprescindibles de esta temporada, pero si la hago, estaremos aquí hasta pasado mañana... y hoy es el cumple de mi venerable madre... y además, ayer me compré en la fnac la segunda temporada de CSI. En fin, que aunque no lo parezca, soy una mujer muy ocupada. Bueno, yo creo que hay tres elementos que, bien elegidos y bien llevados, pueden salvar un atuendo, justificarlo, elevarlo, excitarlo, despertarlo (y hacer que se rompa la crisma, si no son los adecuados). Son: un buen sombrero, unos buenos zapatos de tacón y un buen esmalte de uñas rojo. Los únicos trucos para llevar sombrero son una buena frente y sentirse a gusto. Si te sientes disfrazado con sombrero, mejor que no te lo pongas. A mí me pasa con los abanicos, me encantan como objeto, y me encanta el gesto de abanicarse, pero cuando me abanico, me entra la risa, me siento una impostora (me pasa lo mismo cuando veo a un tío con abanico, me muero). Los zapatos de tacón, altos, femeninos, finos (o sea, que no parezcan dos bloques de madera). Siempre funcionan. Son incómodos, pero nos hacen mejores personas. Los de la foto son mi último gran amor, todavía no los he estrenado; de momento están expuestos en una estantería. Y el esmalte de uñas. A mí solo me gusta el rojo muy rojo (y me encanta que me pinten las uñas, estoy intentando que mi hijo de cuatro años aprenda, es la típica cosa que en el futuro me agradecerá). Esto es glamour, quien lo probó lo sabe.
Feliz martes, queridos.

14 comentarios:

  1. Por dios que a mí lo que me salva la vida de la foto es la Pléiade que respira tras el esmalte de uñas...Sombrero el que me pongo cuando bailo en privado...esmalte de uñas el que nunca me pongo (tendré que probar eso, oye, ahora bien, yo como tú: que me las pinten), y zapatos...pues bueno, yo tengo los que me compré el otro día metidos en la caja, esperando que llegue el otoño para ponerse a tono con los colores y los primeros relentes...

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  2. Nunca te vi con zapatos de tacon....
    Besos!!!

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  3. Oh, Gilbert! Los libros de la Pléiade, también mis favoritos.
    Ja, ja, te mandaré a mi hijo pequeño a que te pinte las uñas, ¿ok?
    Tus zapatos nuevos...ganas de verlos.
    Besos, besos.

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  4. Hola Carlos:
    Hay muuuuuuuuuuuuuuuuuuchas cosas que tú no has visto...
    Un besote

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  5. Quiero un sombrero, y unos zapatos de tacón,y un esmalte de escándalo y un lugar donde ir para disfrutarlos...
    Buon compleanno alla gran signora.

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  6. Y yo también, Silvia...
    Gracias, felicitaré a Esther de tu parte, seguro que le hará ilusión.
    Un beso grande.

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  7. Seguro que tu hijo y yo nos lo pasaríamos en grande: de pequeño quería ser gran jefe sioux y volvía locos a mis padres intentando que me consiguieran unas de esas fastuosas plumas de los indios, me pintaba en la cara las marcas de guerra con las barras de labios de mi madre y fabricaba tiendas en los tiempos de verano...ah verano que muere dando lengüetazos de humedad nocturna y calor indeseado...
    Pd: los zapatos: unos Prada. Me llevé el último 7 que quedaba... Y no hacía una semana que estaban a la venta.
    Pd2: una discreta, modesta pero sincera felicitación para la mujer que un día estuvo ahí, contigo refugiada en su interior y que escuchó tu primer llanto, tu primer grito de vida. Las madres, lo más.

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  8. Buena compañía tiene el bote de YSL: Chéjov, ¡en versión Pléiade! Sus dos compañeros de estantería, aunque no alcanzo a descifrar de quien se trata, seguro que estan igual de bien. Un beso, Andrés

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  9. Muchas felicidades para tu madre. He pasado momentos maravillosos con sus libros y aprendido de sus opiniones.
    ¡ Cuántas veces me he preguntado ante situaciones absurdas que he vivido en la ciudad provinciana que resido, cómo las resolvería ella por su talante abierto y decidido. Saludos.

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  10. Los compañeros de Chejov son Las mil y una noches, gran compañía. Y ante esta visión de tu biblioteca ¿por qué por colecciones y no por autores? No es dar prioridad al editor sobre el autor?

    Besos,

    Cecilia

    Pd. Me encanto el post de los pendientes, yo también me los puse por reivindicación juvenil y se me cierran cada dos por tres.

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  11. Hola Gil: gracias. Es guay mi madre. Sí...

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  12. Hola Andrés:
    Sí, Chejov y la Pléiade. Es uno de mis autores favoritos. Lo entendió todo. Y era tan guapo.
    Un beso.

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  13. Hola Cecilia guapa:
    La biblioteca: como soy un poco chorra, la elección de tener los libros por colecciones es puramente estética. Muy triste, ya...
    No me hables de los agujeros!!! Tengo la sensación de que los míos se cierran por arte de magia en 30 segundos, literalmente, para fastidiarme...
    Un besazo.

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  14. Me ha encantado, Mile! Genial!
    Te mando un beso!
    Amalia

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