miércoles, 24 de marzo de 2010

Dime con qué bolso andas y te diré quién eres





Madrugo porque no tengo más remedio, todavía no entiendo porque el colegio -y la vida en general- no puede empezar a las 10 o a las 11 en vez de a las 8:30 o 9. No lo entendía de niña y sigo sin entenderlo ahora (casi todo lo que no entendía sigo sin entenderlo, más algunas cosas más). En fin, los niños ya estaban en el autocar (el mayor sin el equipo de gimnasia que nos habíamos dejado en la puerta de casa preparado y el pequeño sin calzoncillos porque aunque tiene dos docenas, a las siete de la mañana de aquel día, habían desaparecido todos) y yo (os ahorraré la descripción de cómo suelo ir vestida y peinada a esas horas y de la cara que pongo mientras esperamos al autocar a las 7:53 en la esquina de Paseo de Gracia) me estaba mentalizando para empezar a trabajar. Me acababa de pintar las uñas de morado para ver si me animaba un poco y estaba haciendo una exhaustiva lista de toda las ropa de primavera verano que me compraría si no estuviese arruinada, cuando de repente levanté la mirada distraídamente, vi mi bolso, sonreí y pensé que, a pesar de todo, la vida no estaba tan mal. Soy una mujer de bolsos (hay mujeres de bolsos y mujeres de zapatos, mujeres de cuadros y mujeres de flores, mujeres de un sólo hombre y mujeres de tres o cuatro, etc...), me gustan mucho, creo que a menudo definen bastante a la persona que los lleva y me parece que un bolso bien elegido puede durar veinte años. Aunque en realidad, después de mucho reflexionar he decidido que lo realmente elegante y cool es ir sin bolso, ese es el auténtico lujo. Sí, sí, más que un bolso de Bottega Veneta, de Mulberry, de YSL o de APC. Salir a la calle con las manos en los bolsillos, recordar que vivimos al lado del mar y que las gaviotas sobrevuelan la ciudad, pasear sin rumbo, olfatear la primavera, comprar ropa mentalmente...me acabaré convirtiendo en una persona profunda, lo presiento.

10 comentarios:

  1. Hola querida amiga,
    Creo que se podría decir que soy mujer de zapatos y de bolsos. No puedo resistir la tentación de comprárlos. El otro día fui a mirar escaparates y me compre otro bolso blanco (nunca me gustaron mucho los bolsos blanco, ahora tengo mas de uno) y unos zuecos de verano…porque son muy bonitos. Supongo que la próxima vez saldré a la calle, sin dinero pero con bolso y zapatos nuevos.
    Besos muchos, Maria Carolina.

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  2. Hola Carolina guapa:
    ¿Cómo son los zuecos? Es la tendencia de esta primavera que más atónita me ha dejado. Besos.
    Milena

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  3. A mi siempre me han encantado los zapatos. Desde pequeña. Y desde hace algunos años ya habia observado que me fascinan los bolsos. Los dos ultimos regalos de cumpleaños que he hecho para mis amigas han sido una bolsa de deporte, que ahora son de diseño total y un bolso de esos que se cuelgan como bandolera y cuando tienes niños pequeños son muy útiles porque te dejan las manos libres.

    Creo que hay dos explicaciones para el auge de los bolsos. Una es totalmente comercial. Los han puesto de moda, deliberadamente. Han hecho grandes campañas para promocionarlos. Hay mucha publicidad de bolsos, no os habeis fijado? Y hemos caido en ello. Un bolso distinto para cada ocasion.

    La otra, que se aplica tanto a los zapatos, como a los bolsos, es que son fáciles de comprar. No te los tienes que probar, o apenas. No te tienes que quitar la ropa, lo cual es un engorro, sobretodo en invierno. Nada de probarse ropa de verano, cuando una está superpalida. O ponerse ropa de invierno, cuando hace un calor que te mueres y al menos a mi, o ultimo que me apetece es que me recuerden que va a volver el invierno.

    No sabía que se habían puesto de moda los zuecos. No los he visto, o sea que no sé cómo son exactamente. Recuerdo que en el año 76, o 77 se llevaron muchísimo. Ultimamente encuentro que la moda es muy cíclica.

    Un saludo,

    Malena

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  4. Hola Malena:
    Sí, tienes razón en lo que dices sobre los bolsos. Yo cambio poco de bolso, siempre me da pereza cambiar de sitio las mil cosas que llevo dentro, y siempre, siempre, me dejo algo. En cuanto a los zuecos, al parecer vuelven, sí, ¡y con plataforma!
    Un abrazo.

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  5. ¡ Hola Milena ! Yo soy adicta a los bolsos de Bimba & Lola y a los de Purificación García. ¡ No me llega para más y están muy bien ! Como todo en la vida, lo importante es saber llevarlo.

    Con ganas de verte !!! Carolina I.

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  6. Como me gustan los bolsos! Fui a la pelu el otro dia, (error, error,me corté el pelo y no me gusto nada) y pasando vi un montón de bolsos bonitos.

    Mis preferidos son grandes, tipo capazo, de los que ahora hay muchos, y con las asas lo suficiente largas como para colgartelo al hombro, incluso si llevas abrigo.

    Paradójicamente, eso es lo que me salva de caer en la ruina. Los que están de moda ahora tienen las asas un pelín cortas. Eso me retiene a la hora de comprarlos.

    Vi uno que me encantó en una tienda que se llama Zadig y Voltaire. Lo tenian en dorado y plateado. No llevaba precio y ni me molesté en preguntar. Seguro que era carísimo. Por suerte tenia dos problemas: uno, como digo las asas, y el otro que creo sólo cerraba con una especie de clip, sin ningun tipo de cremallera.

    Estoy pasando unos dias en Inglaterra y me he estado fijando en los zapatos de los escaparates. Aquí no se ven zuecos. Las tiendas lo que tienen son muchos zapatos abiertos por delante y por detrás, con plataforma y suela compensada y la suela es de corcho o de esparto. Básicamente los tienen en dorado o en negro. Son bastante informales, pero los encuentro bonitos y cómodos.

    Milena, volviendo a lo de cambiar de bolso. Tiene un gran punto positivo, común con cambiar de casa. Es la unica manera de hacer limpieza a fondo.

    Un abrazo desde el norte de Inglaterra donde hace frio, viento y llueve.
    Malena.

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  7. Si, el bolso querida Milena es una esclavitud. Cuando son grandes los llenas de cosas y te deslomas. Si son pequeños acabas perdiendo las llaves o el carmín. Si optas por llevar dos, una pequeño y coqueto, otro con el ordenador más tipo bolsa de tela, irremediablemente se te pone aire de botones de hotel o de mozo de estación (¿qué fue de ellos?... las maletas con ruedas otro gran atraso). Y así van las mujeres deslomadas y arruinadas, con maxibolsos y minibolsas, con la ropa para el gimnasio, carpetas, neceseres, carteras, aspirinas, mecheros, etc. Es difícil poner orden con tanta cosa. En Wall Street me contaron que el estricto código de vestimenta limita bastante la creatividad femenina en cuestiones de moda y así todas las mujeres ejecutivas acaban invirtiendo en bolsos y zapatos. Eso, dicen, es lo que "marca" la diferencia. Al verlas caminar con las chancletas en verano (los tacones asoman entre el bolserío) arrumbadas por el peso de tanto equipaje, pensé que eran auténticas tortugas proletarias. Who cares about the bonus?

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  8. Hola Milena, hoy un conjunto de cosas me llevan a ti creo que no es el blog, ni la moda ... es la comunicación, el profundizar, el compartir.Como va de bolsos decirte que me gustan ,los hay ahora preciosos a veces entro a preguntar y salgo pensando que el precio es lo único que no me ha gustado.
    Ayer pasee con mi pequeña de 3 años y lo deje en el coche quise recuperar la sensación libre de muchos dias en los que salia con lo mínimo en el bolsillo. Cuando leas se que Mercè se sentirá feliz de este encuentro que nos une.He leido que haces yoga a mi también me gusta mucho practicarlo ahora estoy completando una formación. Felicidades por el blog, por tu sinceridad y por tu apertura.
    Anna Call

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  9. Hola Milena, soy de Panamá y el fin pasado estaba por un almacén donde vi el libro: "Hoy he conocido a alguien" y me enamoré del mismo. Esta buenisimo. No puedo parar de leerlo.
    Por cierto, creo que soy una mujer de lentes (gafas de sol) y abrigos.
    Saludos desde Panamá

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  10. Hola Milena,

    Escribo desde Palma. A mí lo que me chifla son las bolsas de tela para llevarlas como bolsos. Existen de todo tipo, con medidas distintas, decorados diferentes, grandes, pequeñas, y, como no pesan, no te desloman nunca, y como son baratas, siempre puedes renovarlas. Y no tengo ni idea de bolsos, ni idea. En cambio los zapatos me encantan pero como ahora tengo una fascitis plantar (tendinitis en el pie) tengo que limitarme a una sola marca, una de ésas especiales para pies difíciles y que te ponen los músculos fuertes. O sea, que seguiré comprando bolsas de tela...

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